Cine Charla

Max Steele

Por Emilio Frenk.

Director: Stewart Hendler.

Elenco: Ben Winchell, Josh Brener, Maria Bello, Anna Villafañe, Mike Doyle y Andy García.

Calificación: Mala.

Max Steele (la figura de acción de la compañía de juguetes Mattel) llega a la pantalla grande y los resultados son poco alentadores.

La película comienza con Max McGrath (Ben Winchell), un adolescente que regresa con su madre Molly (Maria Bello) al pueblo donde nació y del que tuvieron que salir a raíz de la muerte del padre.

Eventualmente, Max desarrollará un don que consiste en atraer objetos metálicos y electrónicos y estará acompañado de Steele (Josh Brenner), un extraterrestre que su padre le dejó asignado para brindarle protección a toda costa.

Max realizará una investigación total del trabajo de su padre para descubrir la verdad del accidente en que perdió la vida. Tanto Max como Steele combinarán sus poderes y se convertirán en el superhéroe Max Steele turbo cargado.  

Desde el inicio la película parece una copia de Iron Man en donde todo sale mal.

La dirección de Stewart Hendler y el guión de Christopher Yost son de una calidad muy pobre y el resultado habla por sí mismo.

El abuso de los flashbacks es notorio y los personajes son tan anodinos y predecibles que invitan en diversas ocasiones al respetable público a levantarse de su asiento y abandonar la sala. No se siente ninguna simpatía hacia Max, Steele, o hacia cualquiera de los distintos personajes.

Sorprende que actores como Maria Bello y Andy García aceptaran actuar en esta producción tan mal realizada de principio a fin.

En una película de superhéroes es elemental el ritmo rápido de las acciones (y con mayor razón si la cinta excede el tiempo normal y pasa de las dos horas) y este requisito falló a pesar de su duración de 1 Hora y 32 minutos.

Asimismo, reitero que la cinta fracasó en otro aspecto imprescindible en este tipo de cine: la hechura de los personajes fue realizada de prisa y resultó incapaz de transmitirempatía alguna hacia el público infantil y adulto.

Christopher Yost, guionista de  “Thor: El Mundo Oscuro” y de series animadas de superhéroes, sabe escribir para este tipo de películas, pero por alguna razón ahora los personajes de Max Steele carecieron completamente de fuerza, realismo y veracidad.

Los descalabros sirven y es de esperar que la fallida realizaciónde Max Steele sea una lección para el director Stewart Hendler y que en su siguiente proyecto obtenga un mejor resultado.

Reitero, Max Steele es una de las peores películas de superhéroes que he visto en mucho tiempo. 

Fiesta de Navidad en la Oficina (Office Christmas Party)

          Por Emilio Frenk

          Directores: Josh Gordon y Will Speck.

Elenco: Jason Bateman, Olivia Munn, T.J. Miller, Courtney B. Vance, Jillian Bell, Rob Corddry, Randall Park, Vanessa Bayer, Kate McKinnon y Jennifer Aniston.

Calificación: Mala

Josh Gordon y Will Speck, directores de Papá por Accidente y Deslizando a la Gloria, presentan ahora Fiesta de Navidad en la Oficina, una comedia de esta temporada y la verdad uno se lleva una decepción.

La película transcurre en Chicago, la ciudad del viento, y narra la historia de Josh Parker (Jason Bateman), un supervisor técnico, recién divorciado, que trabaja con la ingeniero Tracy Hughes (Olivia Munn) en la compañía Zenoteck.

Josh mantiene una buena relación laboral con el administrador, Clay Vanstone (T.J. Miller), que ha heredado una parte de la empresa, la cual es controlada en su totalidad por su hermana y presidenta Carol (Jennifer Aniston). Un día, esta última organiza una junta y anuncia que la división de Zenoteck que maneja Clay va a tener que cerrar debido a que sus resultados han sido insuficientes y muy por debajo de los números esperados.

La solución y esperanza es Walter Davis (Courtney B. Vance), un candidato potencial para invertir en la compañía. Para convencerlo de que Zenoteck vale la pena, Clay, Josh y Tracy invitan a Walter a la fiesta de Navidad de la oficina a pesar de que Carol había ordenado que se cancelara.

Con la conciencia de que quizás ésta sea su última celebración como equipo, Clay y su personal inician la fiesta con el objetivo claro de ganarse la confianza de Walter Davis y salvar el trabajo de todos.

Como típica comedia de equivocaciones, a partir de que el vuelo de Carol se suspende por el mal tiempo y ella corre a la oficina porque por casualidad se entera que su chofer ha estado llevando gente a la fiesta, las cosas se complican hasta un grado totalmente disparatado e improbable para llegar después a un desenlace bastante predecible.   

La cinta cuenta con un elenco muy interesante e incluye a dos de los comediantes más exitosos del momento: a T.J. Miller, que en la serie Silicon Valley brilla por su gracia, y a Kate McKinnon, que ha mostrado sus grandes dotes como comediante en Saturday Night Live al interpretar a la candidata presidencial del partido demócrata, Hillary Clinton.

Y no obstante sus buenos actores y de que parte de una premisa interesante, Fiesta de Navidad en la Oficina es una película que se vuelve rápidamente aburrida porque en su ejecución se cometen  una serie de errores: la dirección de Gordon y Speck carece de precisión y detalle para que el hilo de la trama y de las situaciones cómicas vayan in crescendo y, en cambio, sufre caídas  de ritmo y cae en baches y en efectos trillados y clichés en cada escena, lo que termina por volver a la película repetitiva, lenta y demasiado predecible, algo que en el género de comedia es inadmisible.

Cuando se involucra a cuatro guionistas en un filme, como es el caso en este, comienzan los problemas. Uno puede decir que los escritores no se pusieron de acuerdo para expresar lo que querían y eso fue lo que sucedió.

Finalmente, aunque hubo situaciones en que sí me reí,  es a partir del segundo acto que todo se viene abajo y es una pena el desperdicio de recursos y de diversión, sobre todo en esta temporada.

Papá por Accidente y Deslizando a la Gloria fueron películas muy chistosas, por lo que espero que en esta ocasión los goles fallados por Josh Gordon y Will Speck sean un aprendizaje para ambos, y más cuando ya han probado que sí saben realizar cintas de este género.

Fiesta de Navidad en la Oficina es, insisto, una gran decepción, ¿cómo recomendarla?.

 

Capitán Fantástico (Captain Fantastic)

          Por Emilio Frenk. 

          Director: Matt Ross.

Elenco: Viggo Mortensen, George MacKay, Samantha Isler, Annalise Basso, Nicholas Hamilton, Charlie Shotwell, Trin Miller, Frank Langella, Kathryn Hahn y Steve Zahn.

Calificación: Excelente.

Matt Ross dirige y escribe Capitán Fantástico, un drama con tintes de comedia y con mucho corazón que maravilla con el resultado.

Capitán Fantástico narra la historia de Ben Cash (Viggo Mortensen), padre de seis hijos: Bo (George MacKay), Kielyr (Samantha Isler), Vespyr (Annalise Basso), Rellian (Nicholas Hamilton), Zaja (Shree Crooks) y Nai (Charlie Shotwell).

Leslie (Trin Miller), la esposa de Ben, víctima de un trastorno maniaco depresivo está internada en un hospital mientras  el resto de la familia trata de vivir de manera autosuficiente  en un bosque en la costa noroeste de Estados Unidos, en el estado de Washington.

Ben rechaza el consumismo y el modo de vida americano y para darles a sus hijos otro tipo de valores les impone los suyos. Los trata como si fuesen adultos (a pesar de sus edades infantiles y adolescentes) y los cría con una estricta formación intelectual (los muchachos leen desde textos de lingüística hasta de física cuántica)  y los obliga a desarrollar habilidades físicas que les permitan sobrevivir en el aislamiento, apartados de las comodidades y recursos de la civilización urbana.

Con excepción de Rellian (Nicholas Hamilton) y Bo (George Mackay), los hijos aceptan la educación contradictoria de su padre que por un lado tendría la intención de enseñarles a alcanzar su mayor independencia y autonomía pero por otro se convierte en una utopía autoritaria que los confina a vivir en la prisión mental y espacial paterna sin darles la oportunidad real de tomar sus propias decisiones.  

Las cosas se precipitan cuando Ben recibe la noticia de que su esposa Leslie se ha suicidado. Además del golpe para la familia, todos tendrán que regresar a la ciudad para asistir al funeral. Jack (Frank Langella), el suegro de Ben, lo hace responsable de la muerte de su hija y lo amenaza con mandarlo arrestar si se presenta en el sepelio.

Ben buscará cumplir con la voluntad de su mujer de ser incinerada y tomará conciencia de que la libertad de sus hijos no será posible sin su compromiso amoroso de respetar la identidad personal y las decisiones de cada uno de ellos.  

Capitán Fantástico es una película que cuestiona con originalidad el amor familiar, la autoridad de los padres, la relación humana en la sociedad occidental y sobre todo el tema de la soledad y cómo llegar al otro, a comunicarse con él sin afán de controlarlo o manipularlo a través de las ideas propias.

El guión de Ross es inteligente y eficaz y demuestra un talento enorme para  articular hasta los más finos detalles de la dinámica familiar y consigue que la audiencia sienta una conexión auténtica con todos los personajes.

La dirección fue de primera calidad y en ese mismo nivel estuvieron las actuaciones. En mi opinión, ésta ha sido una de las mejores interpretaciones de Viggo Mortensen en su carrera; la forma en la que dio vida a Ben Cash resulta totalmente empática con el público y es casi imposible no sentir una gran identificación con su sufrimiento, estemos a favor o en contra de su utopía educativa.

Capitán Fantástico evoca elementos de Pequeña Miss Sunshine (2006), sobre todo en términos de guión, además de que ambas cintas son independientes.  Es de las mejores películas de este año y no se la pueden perder.

Desde luego que le doy una gran recomendación.



El Fin del Sueño Americano (American Pastoral)

          Por Emilio Frenk. 

Director: Ewan McGregor.

Elenco: Ewan McGregor, Jennifer Connelly, Dakota Fanning, Peter Riegert, Rupert Evans, Uzo Aduba, Molly Parker, Samantha Mathis y David Strathairn.

Calificación: Mala

El actor escocés Ewan McGregor hace su debut directoral con El Fin del Sueño Americano y la verdad que tenía muchas expectativas de éxito pero lamentablemente no se cumplieron.

Basada en la novela de Phillip Roth, El Fin del Sueño Americano está situada a finales de la década de los 60, años de la plena intervención del ejército estadounidense en la guerra de Vietnam, y cuenta la historia de Swede Levov (Ewan McGregor), el chico más popular del pueblo que se enamora y se casa con Dawn Dwyer Levov (Jennifer Connelly), una ex modelo y ex Miss New Jersey.

Swede y Dawn Levov son un matrimonio perfecto, aunque su hija Merry (Dakota Fanning) nace con un problema de habla que la hace tartamudear desde niña y ahora como adolescente.

Merry (Dakota Fanning) se convierte en una joven crítica del entonces presidente Lyndon B. Johnson y de la participación de los Estados Unidos en el conflicto bélico en Asia. En ese entorno, las ideas políticas de Merry se radicalizan y su alejamiento familiar va angustiando cada vez más a sus padres que no pueden comunicarse con ella ni persuadirla para que modere su conducta.

Pasa el tiempo y Merry será la principal sospechosa de haber estallado una bomba en su pueblo y es buscada por el FBI.

Ahora Swede tratará de encontrar a su hija y de mantener a su familia unida antes de que sea demasiado tarde.

A pesar de que El Fin del Sueño Americano es una cinta basada en una novela del mencionado Phillip Roth , el guionista John Romano no logra hilar con orden y claridad la historia ni el peso específico de los personajes. El hilo conductor del filme se pierde en varias secuencias y hay momentos en que no se entiende la aparición de algunos actores, como sucede con  David Strathairn  en un papel totalmente gratuito e inverosímil. Estos errores repercuten en que Swede Levov, el personaje principal, se pierda en una serie de confusiones escénicas porque la trama cambia de dirección hasta volverse caótica.

Ewan McGregor sin duda alguna es de los actores más talentosos de la industria pero su debut como director fue desafortunado y no supo conseguir del elenco actuaciones realistas y creíbles. El tartamudeo de el personaje de Dakota Fanning es excesivo y cansa al espectador.  Se entiende que es una parte del personaje pero es una muleta de la que abusa el director.

Tampoco fue afortunada la idea que la cinta fuese contada por una tercera persona y no desde el punto de vista del personaje de McGregor.

La nota positiva de la película y que resalto es la ambientación  de la época de los 60’s y la inteligente y llamativa recreación de los movimientos de protesta en contra del racismo.

El final fue débil y cursi como se veía venir. La cinta resultó predecible de principio a fin.

Espero que esto sea una gran lección de aprendizaje para Ewan McGregor y ojalá que se le vuelva a dar la oportunidad de dirigir en un futuro.

El Fin del Sueño Americano es una de las mayores decepciones del año y un claro ejemplo de cómo un elenco talentoso es desperdiciado por una conducción errática.

 

 

El Protector (Blackway)

                    Por Emilio Frenk. 

                   Director: Daniel Alfredson.

Elenco: Anthony Hopkins, Julia Stiles, Alexander Ludwig, Lochylyn Munro, Steve Bacic, Ray Liotta y Hal Holbrook.

Calificación: Mala

El director sueco Daniel Alfredon presenta El Protector, una película de suspenso que resulta del todo fallida.

La historia se centra en Lillian (Julia Stiles), una chica que acaba de regresar a vivir a su pueblo (ubicado en la costa noreste de Estados Unidos) y es acosada y atacada por Richard Blackway (Ray Liotta), un ex policía convertido en el jefe de la banda criminal del lugar.

Lillian pide ayuda a los lugareños pero éstos la ignoran por temor a las represalias de Blackway y su grupo, y hasta el mismo sheriff le aconseja que se vaya.

Sin embargo, Lillian está decidida a hacerle frente a su acosador y recluta a las dos únicas personas dispuestas a luchar con ella: un ex leñador llamado Lester (Anthony Hopkins) y su amigo Nate (Alexander Ludwig).

Conocida la premisa de la trama, no hay nada más que atraiga la atención del espectador y, de hecho, El Protector aburre de principio a fin.

Para ser una película de suspenso comete un pecado capital: carece de ritmo y las escenas entonces se vuelven anodinas e incapaces de proyectar momentos de intensidad. Desde su arranque mismo la cinta se pierde en detalles confusos y el espectador se desconcentra en lo que debe ser el hilo conductor de la historia.

Pocas cosas funcionan en El Protector a pesar de contar con un gran elenco, en donde destaca el actor Anthony Hopkins, ganador del Óscar, y por cierto también el productor la cinta.

El guión escrito por Joe Gangemi y Gregory Jacobs  es totalmente predecible y muestra un abuso inmisericorde de flashbacks. Una forma correcta de usar esta técnica fílmica es que sirva para meterse en la cabeza del personaje y desde allí entender cinematográficamente lo que sucede, pero en esta ocasión su empleo excesivo es una puerta falsa y deviene tan sólo en un método de escape que es habitual en el director al que se le agotan las ideas.

La dirección de Alfredson dejó mucho que desear, sobre todo porque no supo aprovechar el talento interpretativo de sus actores y de allí que  las interpretaciones de los personajes, entre ellos el del leñador de Hopkins, carecieran de veracidad.

El Protector está entre los peores filmes del año, por lo tanto no le doy una recomendación.