Por Emilio Frenk.
Director: John Moore.
Elenco: Pierce Brosnan, Jason Barry, Anna Friel, Stefanie Scott, Clare-Hope Ashitey, David McSavage y James Frencheville.
Calificación: Mala.
John Moore, director de Tras Líneas Enemigas y Duro de Matar 5: Un Buen Día para Morir, nos trae ahora El Intruso, un thriller que deja bastante que desear.
La película se centra en Mike Regan (Pierce Brosnan), un hombre de negocios exitoso que en medio de una presentación sobre una aplicación de su compañía conoce al ingeniero en sistemas Ed Porter (James Frencheville).
Mike comienza una amistad con Ed y lo invita a su casa donde convive con su esposa Rose (Anna Friel) y su hija (Stefanie Scott).
Sin embargo, los problemas aparecen. Mike despide a Ed luego de que éste evidencia una serie de conductas y actitudes extrañas y realiza visitas constantes a su hija. Como consecuencia, Ed entra en un estado de furia e invade la privacidad de la familia Regan: se introduce en el sistema de seguridad de su residencia y hackea el sistema de datos de la compañía de Mike.
Mike se ve amenazado y angustiado en una carrera contra el tiempo para deshacerse del joven psicópata y salvar a su familia y a su empresa antes de que sea demasiado tarde.
La falla fundamental e imperdonable de El Intruso es que se convierte en una película predecible de principio a fin.
La dirección de John Moore es completamente débil y errática con sus actores. También fracasa en su pretensión de hacer un filme visualmente atractivo.
Moore comete el error de priorizar el mundo de la tecnología y de las aplicaciones y descuida completamente la trama, la intensidad interpretativa y el talento de sus actores, incluido el mismo Pierce Brosnan.
El guión escrito por Dan Kay y David T. Friendly carece de verosimilitud, los diálogos son dispersos y anodinos y en vez de producir tensión provocan risa por momentos. Asimismo, resulta absurdo que el villano, que es un psicópata, se desquite más con la esposa y con la hija y no con Mike, que es la figura de autoridad y con quien, por lógica narrativa y psicológica, se debió haber dado el juego del gato y el ratón. Pero ni eso.
La edición y la selección de encuadres son deshilvanadas, no siguen criterios claros y definidos y entonces la película proyecta todo un desorden de imágenes y escenas que salen sobrando y que nada justifica su razón de ser en la historia.
La película tenía todos los elementos para que funcionara en sus distintos aspectos pero no fue el caso. El comienzo fue interesante y poco después todo se vuelve aburrido y sin la intensidad necesaria para atrapar al espectador. Quizás haya una escena (en el segundo acto) que mantiene al público en suspenso y que Moore ha sabido manejar con corrección. Pero fue solo una escena y lo demás no funcionó.
Tal vez lo que puede explicar la mediana calidad de la cinta sea la presión por sacar el producto al mercado o la apuesta comercial de que con sólo repetir elementos y rutinas cinematográficas el público estará entretenido y saldrá satisfecho del cine, la inversión se recuperará y las ganancias vendrán con rapidez.
Por todo lo ya afirmado, no le puedo dar una recomendación a El Intruso.
Les invito a que manden sus comentarios a emilio.frenk@gmail.com o mi twitter @FrenkEmilio.